La civilización humana ha sido confinada al Sistema Solar Interior y convertida por otra especie en raza-cliente de bajo nivel… Procedente de un núcleo de resistencia humano en el Anillo Espartano, un héroe venido a menos tendrá la difícil misión de cambiar las tornas.
—Eres un arma, Rudy, no lo olvides —me había dicho Mikka con palabras altisonantes mientras me ayudaba a meterme en el sarcófago biológico—; un arma con el poder de salvar y liberar nuestra civilización.
Lo miré irreverente y comenté:
—¿No te parece demasiada responsabilidad la que cargas sobre mis hombros?¿Y si no lo logro, qué consecuencias tendrá mi fracaso?
—Si fracasas —dijo—, es posible que todos seamos exterminados.