Parece mentira que 150 años después de publicado «El Origen de las Especies», las discusiones en torno a la evolución continúen.
En la tercera parte del documental de Jonathan Miller, «A Brief History of Disbelief» el filósofo Daniel C. Dennett dice que el concepto de evolución es contraintuitivo por que lo normal, lo que uno ve todos los días es que los objetos complejos fabrican objetos mas simples, por ejemplo, uno ve a un herrero fabricar una herradora, pero ver a una herradura fabricar a un herrero es algo que nunca vemos, la gente de la época veía un ceramista haciendo un vaso de cerámica, pero jamas lo contrario, un vaso de cerámica fabricando a un ceramista…
Entonces tenemos a este señor Charles Darwin, quien viene con esta idea totalmente tirada de los cabellos, la evolución, organismos mas simples que se convierten en organismos mas complejos. Tiene que haber sido todo un golpe para la gente de la época.
Pero evidentemente, no es una idea imposible de comprender, por ejemplo, cualquier persona de la época podía ver que algo tan simple como una semilla producía un objeto tan complejo como un árbol, o incluso, la forma en que un bebé termina convirtiéndose en un ser humano adulto.
Sin embargo existía entonces una razón para no querer entender. El dogma.
Fijense ustedes que es muy distinto decir dogma, que decir religión.
Las antiguas religiones al no poseer un cuerpo centralizado de poder, de control, al no tener un vaticano, esas religiones no poseían un cuerpo de «verdades absolutas escritas» y seguramente hubiesen podido adaptarse.
Las religiones judeo-cristianas sin embargo, al poseer un cuerpo centralizado y estar asociadas al poder, no pudieron soportar el desafío que el concepto de evolución representó a su autoridad, a sus verdades absolutas.
Pero eso era entonces, han pasado 150 años, yo pienso que continuar discutiendo es inútil, ya el que no quiere entender, no va a entender, ya no se trata de un descubrimiento revolucionario, ya no pueden decir que faltan pruebas, etc.
Se trata de una cuestión política, así que no pierdan su tiempo 🙂
El cómic de «Eres un buen chico Charlie Darwin» es de Dresden Codak
A nivel personal, cada uno es libre de creer lo que quiera, pero es deprimente y alarmante que en muchos lugares se continúe censurando el evolucionismo de Darwin.
Verdaderamente muy triste, y tu me dirás que ¿es por que no hay medios para entender? En esta época hay programas de televisión que explican la evolución, libros, revistas, páginas web. etc. Ya el que no entiende con todos estos recursos, es que no quiere entender, ¡han pasado 150 años! Y siguen con la censura, que estupidez.