El Galio es un metal interesante se derrite apenas a los 30 ºC. es decir que se puede hacer pasar de un estado sólido a líquido simplemente con el calor de la mano.
Se parece mucho al mercurio, pero con la gran diferencia que no es tóxico.
Otro detalle curioso es que no se mezcla con el agua.
Como el Galio tiene a infiltrarse entre las fisuras de otros metales, puede debilitarlos rápidamente, observen lo que le hace a una simple lata de Coca Cola:
Yo siempre he querido experimentar con un metal así, pero no sabía que había un metal así que no fuera tóxico.