Icono del sitio La Cueva del Lobo

Al Final del Largo Viaje

Otro cuento amigos, este muy corto en verdad, menos de 400 palabras. Espero que sea un poco más popular que el de la semana pasada ¡Jajajajaja!

Al Final del Largo Viaje

Fabian despertó, y mientras se estiraba con lentitud, con un simple pensamiento conectó con las cámaras externas de la nave.

Ya no era necesario utilizar grandes telescopios para admirar la estrella. Su largo viaje se acercaba a su fin, ya podía apreciar Alfa Centauro aproximarse como un pequeño sol a la distancia. Le resultaba difícil recordar la época más de 40 años atrás cuando vio a Sol empequeñecer en la distancia de la misma manera.

—Siempre pensé que el viaje interestelar sería algo para gente joven, personas arriesgadas y ansiosas de aventura. —Dejó el mensaje flotando en el chat central sin esperar que nadie estuviera despierto a aquellas horas.

—La gente joven no tiene tiempo. —La respuesta llegó antes de lo esperado, como un mensaje de voz—, para ellos, 40 años representa toda su vida, mientras que para personas que han vivido tanto como nosotros, una inversión de 40 años tan solo para tener una vista como esta, para vivir un momento como este. La llegada de la humanidad a otro sistema estelar, ¿no vale la pena?

—Mi querida Annetta habla como si el viaje hubiese sido un sacrificio. —Este tercer mensaje llegaba en forma de video de alta resolución. El rostro del hombre simulaba cierta juventud, pero algo en sus ademanes evidenciaba que no era joven en lo más mínimo—. Para mi el viaje ha sido todo un gusto. ¿Cuantos juegos hemos disfrutado? ¿Cuantos mundos inventados hemos visitado? La llegada ya está siendo memorable, pero lo que recordaré con más cariño será el viaje.

Al parecer en la flota colonizadora siempre había alguien despierto, aún a estas tempranas horas.

—Yo no llegué a la meta amigos, al menos no mi viejo cuerpo. Hoy desperté y mi consciencia había sido trasladada a un cerebro artificial. —Esta vez el mensaje llegó como un holograma de realidad aumentada.

—Bueno Carlangas, no serás el primero, ¿cuanto tiempo llevo yo vagando por entre los corredores de la red de la flota colonizadora? Crea un atractivo avatar digital y ya veremos como construir un nuevo cuerpo físico con tiempo.

—Marcos tiene razón —remató Annetta—. Y bueno, mientras tanto yo he terminado mi desayuno y creo que todavía nos faltan unos cuantos años de frenado en los bordes del sistema de Centauro antes de poder entrar al sistema propiamente. ¿quien se anima a una partida de Calabozos mientras tanto?

—¡Me anoto con un paladín! —Exclamó Fabian al tiempo que iba armando su avatar para entrar al nuevo mundo virtual.

—¿De nuevo? ¿No te cansas de jugar paladines? —Preguntó Annetta—. ¿Cuantos has jugado hasta ahora?

—Este será mi paladín número mil —concluyó Fabian.

Fin

Espero que les haya gustado.

Quienes colaboran conmigo por Patreon también pueden disfrutar desde ayer de otro cuento un poco más largo.

Ayudanos a continuar creciendo, comparte este artículo con tus amigos
Salir de la versión móvil